La contaminación por petróleo involucra todas las operaciones relacionadas con la explotación y transporte de hidrocarburos, que inevitablemente llevan al deterioro paulatino del medioambiente. Esta contaminación afecta en forma directa al suelo, el agua, el aire, la fauna y la flora.
Contaminación del suelo:
Las áreas donde existen pozos petrolíferos, baterías, playas de maniobras, piletas de purga, ductos y red de caminos, comprometen grandes extensiones de terreno que resultan degradados. Este deterioro del suelo se debe al desmalezado y alisado del terreno y al desplazamiento y operación de equipos pesados. Además, los derrames de petróleo y los desechos del mismo producen una alteración del sustrato original donde se desarrollan las especies vegetales dejando suelos inutilizados y yermos durante años.
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